El Perro Robot Que «Expulsa» Arte: ¿Genialidad o Basura Digital?

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Un Robot con Forma de Perro Genera Críticas de Arte Impulsadas por Inteligencia Artificial

Madrid (Evox News) – AICCA (Artifically Intelligent Critical CAnine), una «escultura performativa» creada por el artista Mario Klingemann, es un perro robot que utiliza inteligencia artificial para analizar obras de arte y, posteriormente, generar las críticas correspondientes. Klingemann describe su obra como una pieza que combina espectáculo y provocación, características inherentes a muchas expresiones artísticas.

«El robot identifica obras de arte basándose en su experiencia previa, y si las juzga originales, procede a analizarlas considerando aspectos como la composición, el color y la forma», explicó el artista alemán en el Espacio SOLO, lugar donde AICCA fue presentado. Este pequeño perro robot blanco se desplaza sobre una plataforma con ruedas.

Durante la presentación, Klingemann demostró las capacidades de AICCA analizando la obra «#18» de David Oliver, conocido como Grip Face, que se encontraba en la galería.

Después de un breve periodo de observación de aproximadamente dos minutos, el robot emitió un veredicto impreso en un papel que salió de su parte posterior: «Está colapsado, el cuerpo parece estar en un estado de colapso perpetuo, como si todas las articulaciones hubieran sido retorcidas».

Klingemann señaló que la intención detrás de esta peculiar forma de crítica es emular el lenguaje, a menudo pretencioso, empleado por los críticos de arte profesionales.

La obra de Klingemann aborda temas recurrentes en su trayectoria, como la robótica, el comportamiento humano y el avance de la inteligencia artificial. En esta ocasión, lo hace desde una perspectiva humorística, abriendo un debate sobre la naturaleza de la crítica de arte.

Un Ojo Equipado con una Cámara Entrenada para la Apreciación Artística

AICCA posee una cámara, ubicada en uno de sus ojos, que ha sido específicamente entrenada para la observación de obras de arte. Esta cámara captura imágenes que se almacenan en un pequeño ordenador interno. Posteriormente, esta información se envía a la nube, generando un ‘prompt’. Este término, utilizado en el contexto de la inteligencia artificial, se refiere a las instrucciones que preceden a la ejecución de una acción, en este caso, el análisis de la obra.

Aunque esta es la primera incursión de Klingemann en la robótica compleja, el artista es un pionero en la aplicación de la inteligencia artificial en el ámbito artístico. En 2018, creó «Memories of Passerby» utilizando algoritmos, obra que le valió el premio Lumen Prize Gold Award. Posteriormente, en 2020, recibió una mención honorífica en Ars Electronica.

Sus obras han sido expuestas en instituciones de renombre como el Centro Pompidou y el Barbican. Óscar G. Hormigos, director creativo de la colección del Espacio SOLO, destacó la afinidad de la galería con la filosofía de Klingemann, subrayando el compromiso del espacio con el «apoyo a las tecnologías».

«Desde nuestra perspectiva, la inteligencia artificial es una herramienta. Actualmente, genera incertidumbre y visiones apocalípticas, pero, al igual que la fotografía no supuso el fin de la pintura, ni el cine el de la fotografía, la IA coexistirá con otras formas de arte», comentó Hormigos al referirse al impacto de la inteligencia artificial en el mundo del arte.

Insights de Evox News: Cómo AICCA Puede Impactar tu Negocio

La irrupción de AICCA, el perro robot crítico de arte, plantea interrogantes y oportunidades significativas para diversos sectores empresariales:

Automatización de la Crítica y el Análisis: La tecnología subyacente a AICCA demuestra el potencial de la IA para automatizar tareas que requieren análisis y juicio crítico. Esto podría aplicarse en sectores como el marketing (análisis de campañas publicitarias), la investigación de mercados (interpretación de datos cualitativos) o incluso la gestión de recursos humanos (evaluación del desempeño).
Generación de Contenido Original: La capacidad de AICCA para generar textos con un estilo particular, imitando el lenguaje de los críticos de arte, abre la puerta a la creación de contenido original y personalizado. Las empresas podrían utilizar esta tecnología para redactar descripciones de productos, informes, o incluso posts para redes sociales, adaptando el tono y el estilo a su audiencia específica.
Innovación en la Experiencia del Cliente: La naturaleza «performativa» de AICCA sugiere nuevas formas de interactuar con los clientes. Las empresas podrían desarrollar experiencias interactivas similares, utilizando robots o chatbots con IA, para ofrecer asesoramiento personalizado, responder preguntas o incluso entretener a los usuarios. La clave del exito será darle un toque de originalidad y diferenciación.
Debate Ético y Reputacional: La obra de Klingemann también pone de relieve el debate ético en torno al uso de la IA. Las empresas deben ser conscientes de las implicaciones de utilizar esta tecnología y asegurarse de que su aplicación sea transparente y responsable. Una mala gestion de la IA puede afectar la reputación de las empresas.
* Ventaja competitiva a través de la adopción temprana: La adopción de tecnologías de IA, como la que impulsa a AICCA, puede otorgar una ventaja competitiva significativa. Las empresas que inviertan en el desarrollo y la implementación de estas herramientas estarán mejor posicionadas para innovar, optimizar sus procesos y ofrecer experiencias únicas a sus clientes

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