Waymo Supera las 200.000 Carreras Semanales con sus Taxis Autónomos
Waymo, la división de vehículos autónomos de Alphabet, ha anunciado recientemente que sus taxis autónomos, sin conductor de seguridad a bordo, están realizando más de 200.000 viajes semanales. Estos trayectos se llevan a cabo únicamente con pasajeros en el interior del vehículo. Además, la compañía ha implementado un cambio en Austin, donde ahora el servicio solo se puede solicitar a través de la aplicación de Uber. En San Francisco y Phoenix, la aplicación dedicada Waymo One sigue siendo la plataforma principal para reservar viajes.
Aunque Waymo lidera el sector en Estados Unidos, especialmente tras la salida de Cruise (la unidad de General Motors), no está sola en esta carrera tecnológica. La startup May Mobility ofrece servicios similares, sin conductor de seguridad, en Ann Arbor y Peachtree Corners, GA, y planea asociarse con Lyft para operar en Atlanta. En otras ciudades, May Mobility aún opera con conductores de seguridad. Aunque la compañía no ha revelado cifras de viajes, su expansión es notable.
En China, la competencia es aún más intensa. Baidu Apollo es el líder indiscutible, con 1,1 millones de viajes sin conductor de seguridad reportados el último trimestre, lo que equivale a 84.000 por semana. Pony.AI afirma realizar 26.000 viajes semanales, aunque no está claro si todos son sin conductor de seguridad. AutoX, con una flota de 1.000 vehículos, y WeRide, no proporcionan cifras concretas.
Incluso con estimaciones conservadoras para las empresas que no reportan datos, se calcula que se realizan alrededor de 1,3 millones de viajes mensuales en robotaxis sin conductor de seguridad. Esta realidad contrasta con la percepción de algunos, que aún consideran que la conducción autónoma es una tecnología lejana o irrealizable. En las ciudades donde operan estos vehículos, los robotaxis ya son parte del paisaje urbano.
El Verdadero Objetivo: Una Revolución en el Transporte
La apariencia de estos servicios, similar a la de un taxi o Uber, ha llevado a muchos a creer que ese es el objetivo final de estos proyectos. Otros los ven como una solución para la «última milla» en el transporte público. Sin embargo, estas ideas están lejos de la verdadera ambición de estas empresas. Los robotaxis, sin duda, ofrecerán servicios similares a Uber y transformarán el transporte público, pero estas son solo las primeras etapas. Las inversiones multimillonarias no se destinan a reemplazar a los conductores de Uber o a los camioneros, sino a transformar radicalmente la industria del transporte.
Los 1,3 millones de viajes actuales son, en esencia, experimentos diseñados para comprender cómo las personas interactúan con esta tecnología y cómo la valoran.
La meta es mucho más ambiciosa: reemplazar la mayor parte de la industria del transporte terrestre, que genera ingresos globales de aproximadamente 5 billones de dólares. Esta cifra supera ampliamente los ingresos de gigantes tecnológicos como Google, Amazon y Baidu. No se trata de sustituir a Uber o al taxista, sino de revolucionar toda la industria. Aunque ninguna empresa capturará la totalidad del mercado, y se espera una reducción en los costos del transporte, el objetivo final implica abarcar las siguientes áreas, que serán reemplazadas para el cliente:
- Industria automotriz
- Concesionarios de automóviles
- Compañías petroleras (o parte de la compañía eléctrica)
- Servicios automotrices (reparaciones, mantenimiento, lavado de autos, repuestos)
- Seguros de automóviles
- Servicios de transporte compartido
- Agencias de transporte público
- Estacionamientos
- Bancos que otorgan préstamos y arrendamientos de automóviles
- Entrega, logística y transporte de larga distancia
- Neumáticos
- Otros sectores, desde entretenimiento en el automóvil hasta viajes turísticos, ambulancias y cualquier actividad que involucre vehículos.
En definitiva, el objetivo no es ser Uber, sino reemplazar la propiedad del automóvil. Aspiran a ser Uber, pero también Toyota, el concesionario, Exxon, Pep Boys, State Farm, la agencia de transporte público, GMAC, UPS, Michelin y más, todo en uno. Estas son las empresas a las que actualmente se les paga en la industria del transporte. Naturalmente, no lo harán todo por sí mismas; subcontratarán a empresas como estas para proporcionar componentes y servicios, pero mantendrán el control, decidirán quién presta el servicio y quién recibe el pago. Y, afortunadamente, ninguna empresa controlará todo.
En este proceso, redefinirán dónde vivimos y trabajamos, cómo nos movemos y la configuración misma de nuestras ciudades. El transporte siempre ha tenido este poder transformador, y cada siglo ha presenciado una innovación en este campo, ya sean trenes, automóviles o robotaxis, que ha remodelado el mundo.
Uber se está asociando con Waymo tanto en la aplicación para solicitar viajes como en la gestión de centros de operaciones. Waymo obtiene clientes sin esfuerzo, y Uber adquiere experiencia en la gestión de un servicio con robotaxis. Esperan replicar su éxito como intermediarios entre conductores y pasajeros, pero con los conductores humanos, tienen el poder y controlan el juego. Con Waymo, esto nunca sucederá: Alphabet los supera ampliamente como empresa. Tal vez encuentren un rol funcional, pero no hay duda de quién trabajará para quién. No lo llamamos el iPhone de Foxconn, pero tampoco es malo ser Foxconn.
En resumen, no se trata solo de crear un conductor robótico de Uber. Tampoco, como muchos especulan debido a que Google (una empresa de publicidad, si se analiza su balance) fue la pionera, se trata de monetizar la atención de los usuarios con anuncios mientras están en el automóvil. Eso sería poner el carro delante del caballo. La movilidad es una industria mucho más grande que la publicidad.
Insights de Evox News: Cómo la Expansión de los Robotaxis Puede Impactar tu Negocio
La rápida expansión de los servicios de robotaxis, liderada por empresas como Waymo y Baidu, presenta tanto oportunidades como desafíos significativos para una amplia gama de negocios:
Industria Automotriz: La transición hacia los vehículos autónomos como servicio (VAaS) amenaza el modelo tradicional de propiedad de automóviles. Los fabricantes deben adaptarse desarrollando flotas de VAaS, colaborando con empresas de tecnología de conducción autónoma o enfocándose en nichos de mercado que no sean fácilmente reemplazables por los robotaxis.
Concesionarios y Servicios Automotrices: La disminución de la propiedad individual de automóviles impactará negativamente en los concesionarios y talleres de reparación. Estos negocios deben diversificarse ofreciendo servicios de mantenimiento y gestión de flotas para empresas de robotaxis o explorando nuevos modelos de negocio centrados en la experiencia del cliente en lugar de la venta de vehículos.
Sector Energético: La electrificación de las flotas de robotaxis impulsará la demanda de electricidad y la infraestructura de carga. Las compañías energéticas deben invertir en energías renovables y en la expansión de la red de carga para satisfacer esta creciente demanda y posicionarse como proveedores clave para la industria de la movilidad autónoma.
Seguros: El modelo de seguro tradicional, basado en el conductor individual, se volverá obsoleto. Las compañías de seguros deben desarrollar nuevos productos diseñados para flotas de vehículos autónomos, cubriendo riesgos como fallas tecnológicas, ciberataques y responsabilidad civil en caso de accidentes.
Logística y Transporte: Las empresas de logística y transporte de mercancías pueden beneficiarse enormemente de la automatización. La implementación de camiones autónomos puede reducir los costos operativos, aumentar la eficiencia y mejorar la seguridad en las carreteras. La clave estará en la adaptación tecnológica y la capacitación de la fuerza laboral.
Desarrollo Urbano y Estacionamientos: La reducción de la necesidad de estacionamiento en las ciudades liberará espacio para otros usos, como viviendas, parques o áreas comerciales. Las empresas inmobiliarias y los operadores de estacionamientos deben anticipar este cambio y buscar nuevas oportunidades de negocio en la reconfiguración urbana.
* Innovación y Ventaja Competitiva: Las empresas que adopten tempranamente la tecnología de conducción autónoma y la integren en sus operaciones pueden obtener una ventaja competitiva significativa. Esto puede manifestarse en la optimización de la cadena de suministro, la mejora de la eficiencia operativa, la creación de nuevos modelos de negocio o la oferta de servicios innovadores a los clientes.
En resumen, la expansión de los robotaxis no es solo una revolución tecnológica, sino también una transformación económica que afectará a múltiples industrias. Las empresas que comprendan este cambio y se adapten proactivamente estarán mejor posicionadas para prosperar en el futuro de la movilidad