La Unión Europea contempla ajustar su Ley de Inteligencia Artificial
La Comisión Europea está considerando una posible revisión de la Ley de Inteligencia Artificial, normativa que fue implementada recientemente, según declaraciones de Henna Virkkunen, vicepresidenta para la Soberanía Tecnológica del organismo.
Virkkunen enfatizó el compromiso con el enfoque basado en riesgos de la ley actual, pero señaló: «también estamos analizando si existen cargas burocráticas u obligaciones de notificación que podamos suprimir para las pequeñas y medianas empresas».
Esta consideración se enmarca dentro de una estrategia más amplia presentada por la Comisión para fomentar el desarrollo de la IA en la UE. Dicha estrategia incluye la propuesta de crear hasta cinco gigafactorías (instalaciones público-privadas con capacidades de cómputo avanzadas) y tiene la simplificación normativa como uno de sus ejes fundamentales.
Con este fin, Bruselas ha iniciado una consulta pública dirigida a la industria y otros actores relevantes. El objetivo es recabar opiniones sobre los «desafíos» en la implementación de la Ley de IA e «identificar en qué aspectos la incertidumbre regulatoria está obstaculizando el desarrollo de la tecnología», según se detalla en la propuesta de la Comisión.
Los resultados de dicha consulta serán clave para determinar «si el acervo digital, incluida la ley de IA, refleja adecuadamente las necesidades y limitaciones de pequeñas y medianas empresas», indica el documento oficial.
Código de Conducta para la Inteligencia Artificial Generativa
Paralelamente, la Comisión está elaborando un código de conducta específico para los desarrolladores de modelos de IA generativa. Este proceso ha generado inquietud entre organizaciones de la sociedad civil, la Coalición Europea de Creadores y los eurodiputados responsables de la redacción original de la Ley de IA.
Dichos grupos advierten que el borrador más reciente del código no exige a las compañías evaluar ni mitigar adecuadamente los riesgos potenciales que los modelos de IA generativa podrían suponer para los derechos fundamentales de los ciudadanos.
Al respecto, Virkkunen manifestó ser «consciente de las críticas» suscitadas por el borrador actual y aseguró que no representa la versión final del documento.
En relación a las preocupaciones expresadas por asociaciones de creadores y periodistas sobre la protección de los derechos de autor bajo la Ley de IA, la vicepresidenta recalcó que su respeto es «muy importante».
No obstante, añadió: «me gustaría animar a los propietarios de derechos de autor a que faciliten más contenidos para el entrenamiento de la inteligencia artificial».
La funcionaria europea subrayó la necesidad de «encontrar el equilibrio» para asegurar una «compensación justa» a los creadores cuyo trabajo se utiliza en el entrenamiento de IA, si bien reconoció que alcanzar dicho equilibrio es «muy difícil».
Cabe destacar que Bruselas también ha retirado previamente una propuesta de ley sobre responsabilidad civil para empresas de IA y actualmente prepara un paquete de simplificación digital previsto para el último trimestre de 2025.
Insights de Evox News: Cómo la posible revisión de la Ley de IA de la UE puede impactar tu negocio
La potencial revisión de la Ley de Inteligencia Artificial de la Unión Europea representa un punto de inflexión con implicaciones directas para las empresas que operan o planean operar en el mercado europeo.
Desde una perspectiva económica, la simplificación de la normativa, especialmente la reducción de cargas burocráticas y obligaciones de notificación para PYMEs, podría disminuir significativamente los costes de cumplimiento. Esto liberaría recursos que las empresas podrían reinvertir en desarrollo, innovación o expansión, potencialmente acelerando la adopción de tecnologías de IA y dinamizando el sector. No obstante, el periodo de consulta y revisión podría generar incertidumbre regulatoria temporal, lo que podría ralentizar decisiones de inversión a corto plazo.
En términos de ventaja competitiva, una normativa más ágil y adaptada a las necesidades de las empresas, particularmente las más pequeñas, podría nivelar el campo de juego, permitiendo a startups y PYMEs competir más eficazmente con grandes corporaciones que disponen de mayores recursos para la gestión regulatoria. Las empresas que se adapten rápidamente a cualquier cambio normativo y demuestren un cumplimiento robusto, especialmente en áreas sensibles como la IA generativa y los derechos de autor, podrían fortalecer su reputación y ganar la confianza de clientes y socios, diferenciándose en el mercado.
Desde el punto de vista de la innovación, la reducción de la burocracia puede fomentar un entorno más propicio para la experimentación y el desarrollo de nuevas aplicaciones de IA. Sin embargo, el debate en torno al código de conducta para la IA generativa y la protección de derechos fundamentales y de autor es crucial. Un marco regulatorio equilibrado, que proteja adecuadamente sin ahogar la innovación, será fundamental. La claridad sobre el uso de datos para entrenamiento y la mitigación de riesgos determinará la viabilidad de muchos modelos de negocio emergentes basados en IA y la capacidad de Europa para mantenerse a la vanguardia tecnológica. Las empresas deben seguir de cerca estos desarrollos para anticipar cómo afectarán a sus estrategias de innovación y gestión de riesgos